Netflix le da la vuelta a las series de televisión

Si la industria cinematográfica busca alternativas y nuevas vías con las que mantenerse a flote, en la televisión las cosas no son muy diferentes. Los nuevos modelos de consumo que permite la tecnología han alejado a muchos espectadores de las salas de cine, pero también hacen que la forma de acercarse a la pequeña pantalla sea diferente a la de hace solo unos años. La audiencia de las emisiones convencionales cae (pese a que la televisión social permite disfrutarla de otra manera) y el espectador escoge otras fórmulas para ver sus programas favoritos.

Ya no es necesario estar en casa a una hora determinada para no perdernos el último capítulo de esa serie que nos gusta tanto. Las descargas (legales o no) o la televisión online son ya sustitutos más que habituales de la ‘vieja televisión’ y se imponen soluciones que permitan adaptarse a la nueva realidad.

Uno de los primeros pasos en este sentido lo ha dado la plataforma de vídeo en streaming Netflix, que se ha pasado a la distribución de series de televisión con una original fórmula. Los capítulos ya no llegan un día determinado a una hora fijada, a razón de uno a la semana, por ejemplo. Netflix opta por subir todos los episodios de la temporada a la vez y son los suscriptores de esta plataforma quienes deciden cuándo y cómo verlos.

La experiencia nació con House of Cards, serie ambientada en los pasillos gubernamentales de Washington que protagoniza Kevin Spacey, y ahora le ha tocado el turno a la nueva temporada de Arrested Development, cancelada hace unos años y que tiene una segunda vida gracias a este sistema de distribución. Los seguidores de esta comedia llevan meses esperando el desembarco de la familia Bluth y a partir de hoy, cuando la serie ya está a disposición de los usuarios de esta plataforma, se auguran auténticos maratones para ver cuanto antes todos los episodios.